MADRID.- El etarra José Ignacio de Juana Chaos, en huelga de hambre desde hace 90 días, sólo recibirá en el hospital las visitas de su compañera sentimental y de sus abogados. Así lo ha decidido Instituciones Penitenciarias un día después de que 'The Times' publicase una entrevista y fotografías del preso postrado sobre su cama del Hospital 12 de Octubre de Madrid.
La Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha abierto una investigación para conocer quién y cómo hizo esas fotografías. Aseguran que no se ha autorizado a ningún medio de comunicación la entrada en la habitación del preso. De Juana Chaos está internado en una zona del Hospital acotada, de acceso restringido y con continua vigilancia policial.
Hasta ahora, había recibido otras visitas durante su estancia en el hospital. Además de su compañera sentimental y de sus abogados, el pasado 31 de enero la escritora Laura Mintegi y otros representantes del mundo de la cultura vasca accedieron a la unidad en la que se encuentra. Ningún otro grupo podrá ver ahora al etarra.
En la entrevista con el diario británico, la primera que concede desde que inició su protesta, el etarra reclama la reanudación del proceso de paz. "Después del episodio de Barajas la resolución del conflicto es más necesaria que nunca", mantiene desde la cama del hospital. En la imagen se le ve delgado, atado a la cama y con una sonda nasogástrica.
Sus declaraciones han levantado de nuevo la tormenta política y el cruce de acusaciones entre el Gobierno y el principal partido de la oposición.
La Plataforma cívica España y Libertad ha interpuesto en la Audiencia Nacional una denuncia contra él por un delito de enaltecimiento del terrorismo y menosprecio a las víctimas con sus declaraciones al diario británico. Y la AVT ha pedido a los españoles que envíen correos electrónicos a 'The Times', al presidente Zapatero y al mandatario andaluz Manuel Chaves en recuerdo de las víctimas de De Juana Chaos.
Según publica hoy EL MUNDO los médicos que atienden al etarra solicitaron autorización la semana pasada a la Audiencia para sedarle en caso de que su oposición a ser alimentado artificialmente se radicalice.
María Peral informa de que durante la alimentación forzosa por sonda nasogástrica, proceso que dura varias horas cada día, De Juana está teniendo que ser inmovilizado de piernas y brazos con el fin de que no pueda rechazar el catéter. Pero incluso proceder a la inmovilización está siendo complicado, por lo que los médicos creen que en algún momento puede ser preciso sedarle.
EL MUNDO.
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