
«La izquierda abertzale ha tenido opción de participar en las elecciones por medio del voto legal de EHAK». Afirmación tan concluyente como esta no parte de informes de las Fuerzas de Seguridad del Estado, del más celoso de los fiscales o del PP, sino que se incluye en el «zutabe» número 108, correspondiente a julio de 2005. En el citado boletín interno, ETA se mostraba eufórica por el «éxito» obtenido en los últimos comicios autonómicos vascos, cuando el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK o PCTV) logró ocho escaños en el Parlamento de Vitoria.
La banda se erige en representante del conjunto de la «izquierda abertzale» y, sin embargo, en un reciente auto el magistrado Baltasar Garzón consideraba que no toda ella es ETA-Batasuna. Los etarras acogen el resultado electoral del PCTV como un «éxito» propio y, pese a ello, el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero insiste en que no hay pruebas para ilegalizar al Partido Comunista de las Tierras Vascas. Fuentes de las Fuerzas de Seguridad se preguntan si no lo son las afirmaciones que la banda vierte en su panfleto, auténticas declaraciones inculpatorias que conectan a la nueva formación con ETA-Batasuna.
«Pruebas» que aporta ETA
En el citado «zutabe», ETA analizaba los resultados de las últimas elecciones autonómicas vascas bajo el título «El éxito de EHAK. La fortaleza de la izquierda abertzale». Ya en el título, «Ternera» vincula lo que otros se empeñan en desvincular. «La ilegalización de dos candidaturas y finalmente haber tenido la posibilidad de participar de forma legal por medio de EHAK, podría haber generado confusión de cara a la base y entre los militantes», apuntaba el «zutabe», pero «una vez más, hemos podido ver que, por encima de siglas, los ciudadanos dan su apoyo al proyecto que la izquierda abertzale representa».
En definitiva, según ETA, «la izquierda abertzale ha sido la principal ganadora de las elecciones, ha conseguido un gran éxito».
A lo largo del boletín etarra se repite una y otra vez la fórmula matemátiva ETA más Batasuna más PCTV, igual a izquierda abertzale. Por ejemplo, se indica que esta «ha recuperado el lugar que le corresponde» o «la izquierda abertzale se ha situado en el centro político y ha conseguido la importante baza de condicionar e influir. Tiene la posición central para influir dentro del Parlamento y eso da una gran capacidad a EHAK».
Incluso los etarras se expresan en primera persona del plural cuando aluden a la izquierda abertzale. Una izquierda abertzale que «está hoy más fuerte que ayer, y tendremos que servirnos de esa fuerza para fortalecer la línea general dándole continuidad».
¿Alguien que se considera de la izquierda abertzale ha denunciado públicamente que ETA se autoproclame como su representante y mando único? A fecha de hoy, no. Por el contrario, cuando la banda se ha erigido en interlocutor del pueblo vasco, sus auténticos representantes se han apresurado a desautorizar esa barbaridad. Además, ningún dirigente del PCTV -no tiene militantes ni votantes- se ha rebelado contra la organización criminal cada vez que le impone la estrategia a seguir. Al contrario, han asentido con sumisión, según las Fuerzas de Seguridad.
«Marcas» de «reserva»
Está por ver ahora si el Gobierno insta a la ilegalización de la marca ETA ante los comicios de mayo. De momento, la negativa del Gobierno a instar a la ilegalización del PCTV deja a Batasuna las puertas abiertas para irrumpir en las instituciones.
El Partido Comunista de las Tierras Vascas e «Izquierda Abertzale» son dos de las marcas electorales que baraja ETA para los próximos comicios municipales y al Parlamento de Navarra. Ambas son herederas de de Herri Batasuna, Euskal Herritarrok y Batasuna.
Desde el «aviso a navegantes» que supuso el encarcelamiento de la mesa nacional, las diferentes tramas políticas de ETA han ido adoptando la forma de camaleón, más que de serpiente, en un intento de burlar la acción de la Justicia. Han ido cambiando la piel para sobrevivir, pero defendiendo los mismos fines -territorialidad y autodeterminación- con los mismo medios -el terrorismo que practica la banda-.
La HB de la ponencia «Oldartzen» -instigadora de la «socialización del sufrimiento»- pasó a ser la EH que reclamaba «españoles fuera» o «kaña al PP y al PSOE» cuando ETA asesinaba a cargos y dirigentes constitucionalistas. Finalmente, se refundó en la Batasuna que mantiene vigente el chantaje de «sin autodeterminación y territorialidad no habrá paz».
Informes de la Guardia Civil
Salvo el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y los partidos nacionalistas, pocos dudan que el Partido Comunista de las Tierras Vascas está absorbido por ETA. La conexión la probó una y otra vez la Guardia Civil en concluyentes informes -reuniones con Batasuna, en numerosas «herriko tabernas» se recaudaban fondos para EHAK...-. La realidad, basada en infomes policiales, no ha hecho sino avalar el trabajo de los investigadores: seis miembros de Batasuna dirigen desde el Parlamento vasco la estrategia del nuevo partido.
ABC
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