miércoles, 4 de julio de 2007

La Guardia Civil estrecha el cerco a Txeroki, jefe de ETA, con las últimas caídas en Francia

Las Fuerzas de Seguridad de España y Francia estrechan el cerco en torno al dirigente del «aparato militar» de ETA, Garikoitz Aspiazu, «Txeroki», tras la detención, el lunes, de dos de los pistoleros de su máxima confianza, José Antonio Aranibar Almandoz y Ekaitz Aguirre Goñi,«Ehun», a los que se une el también etarra Ángel Cardaño Reoyo.
Las primeras investigaciones apuntan a que el operativo se produjo cuando Aranibar, en su condición de «lugarteniente» de «Txeroki», mantenía una cita con los integrantes del «comando», Aguirre y Cardaño, a pocos kilómetros de la frontera, para darles las últimas instrucciones y entregarles las armas y el explosivo. Al parecer, los pistoleros tenían orden de perpetrar de manera inminente un atentado en Navarra, quizá contra las Fuerzas de Seguridad del Estado, y replegarse de nuevo a Francia.
Aranibar Almandoz podría ser, precisamente, el responsable directo de los «comandos»que entran en España para perpetrar una acción terrorista concreta, pero que tienen su base en el vecino país. Un «modus operandi» que empleó, por ejemplo, la célula autora del atentado contra el aeropuerto de Barajas. En este sentido, las fuentes consultadas no descartan que Aranibar estuviera relacionado con la salvajada de la T-4, pero más que como autor material, como instigador. En aquella ocasión la furgoneta empleada como coche bomba fue robada en Francia a un vecino de Guipúzcoa al que tuvieron retenido varios días.
En cualquier caso, las fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por ABC precisan que uno de sus cometidos en la actualidad, al menos el que estaba desempeñando en el momento de su captura, era entregar el material al «comando» integrado por los otros dos arrestados y darles las últimas instrucciones antes de pasar a España. Esta segunda misión la realiza tradicionalmente el propio jefe del «aparato militar» o alguno de sus «lugartenientes», lo que deja bien claro el relevante papel operativo que actualmente tenía Aranibar dentro de la estrategia terrorista. De hecho, para realizar esta labor debe conocer la ubicación, en Francia, de los «zulos» de máxima seguridad -los que ocultan las armas y el explosivo de los que se abastece toda la red de células terroristas- .
Atentar y replegarse
La Guardia Civil y los Reinsegnements Génraux investigan cuál era el objetivo contra el que planeaban atentar de forma inminente los integrantes del «comando» Aguirre y Cardaño. El hecho de que los dos terroristas viajaran desde Francia en una furgoneta con las armas y el explosivo alimenta la sospecha de que tuvieran la intención de perpetrar un atentado en Navarra para replegarse después de nuevo a Francia. Por lo general, los pistoleros que van a integrar un «comando» estable se trasladan sin armas ni explosivos al lugar indicado por los cabecillas y, posteriormente,reciben allí la entrega del arsenal.
Además, las primeras investigaciones apuntan a que los etarras pretendían rellenar con explosivo las dos bombonas de gas butano para provocar el efecto cañón y que la onda expansiva saliera desprendida hacia un objetivo concreto. Ello, unido a que tenían cáble para activar el explosivo eludiendo posibles inhibidores hace pensar que podrían haber pretendido atentar contra patrullas de las Fuerzas de Seguridad o el vehículo de alguna autoridad, que suelen llevar este sistema.
José Antonio Aranibar Almandoz, de 27 años de edad, natural de la localidad navarra de Vera de Bidasoa, se hallaba en paradero desconocido desde principios de 2004, tras la detención del entonces cabecilla del «aparato militar» Ibón Fernández Iradi, «Susper». A este etarra se le incautó una lista con varias decenas de pistoleros y aspirantes a serlos, entre los que se incluía Aranibar.
Ekaitz Aguirre Goñi, de 25 años de edad, natural de San Sebastián, era otro de los hombres de la máxima confianza de Txeroki. En agosto de 2000 participó en una manifestación no autorizada en la que fue atacado un autobús municipal, en San Sebastián. En septiembre de 2002 fue detenido por la Guardia Civil en la capital donostiarra por esos hechos, aunque en diciembre quedó en libertad provisional.
Se considera huido desde septiembre de 2003 por haber sido ordenada su detención e ingreso en prisión para cumplir 15 meses de cárcel que le restaban de condena como autor responsable de un delito de amenazas y resistencia a los agentes de la autoridad por los hechos ocurridos en agosto del 2000.
Reuniones con Txeroki
En marzo de 2007 fue uno de los huidos identificados con motivo de la desarticulación en las provincias de Álava, Guipúzcoa y Navarra del «comando» de «liberados» de ETA denominado «Urederra». Se trata de un terrorista de cierto peso, ya que se sabe que se ha reunido varias veces con Txeroki.
El segundo integrante del «comando» neutralizado el lunes era prácticamente un desconocido para las Fuerzas de Seguridad. En efecto, Ángel Cardaño Reoyo, de 27 años de edad, natural de Bilbao, fue detenido por la Ertzaintza tras participar en febrero de 2002 en el incendio de un autobús. En 2004 se comprobó que conocía a un individuo que posteriormente fue detenido durante una operación en Vizcaya contra la infraestructura de la banda en las dos márgenes del Nervión. En cualquier caso, en esa ocasión ni siquiera formó parte de los objetivos del Instituto Armado. Pero se desconocía que se hubiera reincorporado a ETA. Es más, las Fuerzas de Seguridad sospechan que hace poco pasó a Francia.

ABC.

No hay comentarios: