Batasuna/ETA quiere acudir a las elecciones con la marca «Izquierda Abertzale»
ETA-Batasuna intenta una vez más defraudar la Ley de Partidos para irrumpir en las próximas elecciones y se plantea hacerlo con la coartada de una agrupación que se llamaría «Ezker Abertzalea» (Izquierda Abertzale), el mismo nombre que el Partido Comunista de las Tierras Vascas puso a su Grupo en la Cámara de Vitoria. Los proetarras van a esgrimir un reciente auto de Garzón en su pretensión de colarse en los comicios.
La coalición ilegal no puede concurrir con las mismas siglas, pero quiere que las candidaturas que pudiera presentar sean identificadas claramente por sus potenciales votantes. Por ello, hace semanas lanzó la campaña «Orain Ezker Abertzalea» (Ahora la Izquierda Abertzale), que la está divulgando por el País Vasco y Navarra. Lo hace en actos en los que presenta nuevas plataformas electorales, denominadas genéricamente «Ezker Abertzalea», y se le añade en cada caso el nombre del municipio correspondiente. El mensaje, así, es claro, porque desde siempre los dirigentes de HB, EH y ahora Batasuna se han autoproclamado como representantes de la «izquierda abertzale».
Prioridad, Navarra
Pero si para ETA-Batasuna es prioritario presentarse a los comicios municipales y a juntas generales de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa, más lo es si cabe concurrir a las elecciones para el Parlamento de Navarra. Máxime cuando hace pocos días propuso una «autonomía política» que incluya al País Vasco y a Navarra. En Navarra, a diferencia de la Cámara de Vitoria, no tiene escaños.
Equipos de las Fuerzas de Seguridad encargados de este tipo de investigaciones ya estaban sobre la pista, pero una información publicada el pasado 5 de febrero por «Gara» ha convertido los indicios en prueba. Así, el rotativo proetarra señalaba que desde hace semanas «en diferentes localidades, capitales y herrialdes de Euskal Herria centenares de personas representativas de la izquierda abertzale vienen perfilando públicamente la apuesta electoral de la izquierda independentista...». Como muestra de impunidad, añadía el periódico que en «todos» los actos de presentación de esas agrupaciones se repetían frases como «no han podido con nosotros», que recuerda aquella otra plasmada en documentos de Batasuna de que «hemos superado la política de la ilegalización».
Las primeras localidades elegidas por Batasuna como campo de prueba para defraudar la Ley han sido Pamplona, Burlada, Lesaca y Tuleda, en Navarra; Bilbao y Baracaldo, en Vizcaya; Vitoria y Salvatierra, en Álava; así como San Sebastián, Rentería o Usúrbil, en Guipúzcoa.
«Gara», en su afán de transmitir un mensaje claro, no tenía reparos en subrayar que en el acto de Tudela había participado el dirigente de Batasuna Pernando Barrena, quien dijo que «han sido necesarios años de lucha y compromisos para crear nuevas condiciones políticas». En el de Rentería, por ejemplo, uno de los intervinientes declaró que «si alguien piensa que es posible sacar adelante un proceso democrático con la izquierda abertzale fuera de las elecciones o de las instituciones, está muy equivocado».
Y por si quedaran dudas, uno de los proetarras que intervino en Usúrbil aclaró que «a pesar de que nos echaron del ayuntamiento, vamos a volver. Estamos a sus puertas hoy con la convicción de entrar en junio por la puerta grande».
«Oficina electoral»
Además, Batasuna no ha tenido problemas en abrir una «oficina electoral» en la localidad navarra de Barañáin nada clandestina, ya que en su puerda hay un cartel luminoso con el lema «Orain Barañáin», firmado por «Barañaingo Ezker Abertzalea» (Izquierda Abertzale de Barañáin).
¿Podrá Batasuna burlar la Ley de Partidos y concurrir a las elecciones? Por lo pronto, está reclutando entre simpatizantes de la izquierda abertzale no «fichados» para formar parte de esas agrupaciones. Sin embargo, una aplicación rigurosa de la normativa electoral se lo pondría difícil, ya que se establece que «no podrán presentar candidaturas las agrupaciones de electores que, de hecho, vengan a continuar o suceder la actividad de un partido político declarado judicialmente ilegal y disuelto o suspendido». De no prosperar la maniobra «Ezker Abertzalea», a Batasuna le queda en la recámara el Partido Comunista de las Tierras Vascas.
ABC.
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