viernes, 25 de mayo de 2007

La denuncia en «Gara» contra el PSOE hace temer un aumento del terrorismo


Expertos antiterroristas consultados por LA RAZÓN analizaban ayer con preocupación la información publicada por «Gara» en la que se narran los supuestos incumplimientos del PSOE en el «proceso» negociador con Batasuna. Lo interpretaban como un paso más hacia un escenario de mayor actividades violentas, incluso atentados, con ruptura oficial o no del alto el fuego. El «salto cualitativo» que supone el intento de atentado contra un candidato socialista con una bomba de fabricación casera se cita como otra prueba de la estrategia que va a seguir el mundo de ETA en las próximas semanas.
La publicación del segundo capítulo de las revelaciones sobre el proceso negociador se refiere a los supuestos acuerdos a los que se habría llegado entre el PSE y Batasuna en una reunión secreta celebrada el 29 de mayo del año pasado.
De los seis puntos consensuados, sólo dos, el relativo a una declaración de Patxi López (realizada al día siguiente en la que anunciaba que se pasaba a la «fase de las negociaciones» y que tanto revuelo ocasionó) y la reunión oficial entre ambas delegaciones, que se produjo el 6 de julio en un hotel de San Sebastián, se habrían cumplido.
A finales de mayo tuvo lugar el Debate sobre el Estado de la Nación en el que Zapatero admitió que el diálogo con los terroristas se podía iniciar aunque no hubiera llegado la paz. Fue entonces cuando el líder de la oposición, Mariano Rajoy, a la vista de estas circunstancias y al sentir traicionado la ayuda que prestaba hasta ese momento al «proceso», retiró dicho apoyo.
Los otros puntos de acuerdo se referían a que el comienzo de la negociación se produciría antes del 31 de julio y que en octubre se pondría en marcha la llamada «mesa de partidos» para establecer la vías con las que el País Vasco alcanzaría la independencia, Navarra incluida. Precisamente, dos de los apartados estaban dedicados al PSN, a la declaración que debía hacer su líder en aquel momento, Carlos Chivite (sustituido por imposición de la dirección del PSOE) y al inicio de conversaciones con Batasuna.
La información de «Gara» ponía el acento en el incumplimiento de los apartados relativos a Navarra, lo que se ha interpretado en las fuentes consultadas como una maniobra para perjudicar la reelección de Miguel Sanz como presidente. Se trataría de «demostrar» que el Gobierno no ha cedido a las exigencias proetarras aunque los socialistas vascos estuvieran dispuestos a hacerlo. Para la llamada izquierda abertzale, es vital que UPN no repita victoria. Aunque la alternativa de un gobierno formado por socialistas y Nafarroa Bai no les guste, creen que hay alguna posibilidad de iniciar el proceso para que Navarra quede integrada en el País Vasco.
En la reunión del 29 de mayo, los socialistas, según «Gara», habrían puesto sobre la mesa que Batasuna diera los pasos para que quedara legalizada en el verano. Los proetarras se negaron y sólo hace unas semanas trataron de inscribir un nuevo partido con la certeza de que sería rechazado.

LA RAZON.

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