
Amenazó con volver a ponerse en huelga de hambre si era otra vez encarcelado y en ello anda. El preso etarra Ignacio de Juana Chaos no ha comunicado a Instituciones Penitenciarias oficialmente a través de un escrito que haya iniciado su tercer ayuno voluntario en menos de un año. Pero la realidad es que el terrorista se ha negado a ingerir cualquier alimento desde que volvió a ser internado en la cárcel de Aranjuez la tarde del miércoles, después de que el Gobierno decidiese su reingreso en prisión horas después de que ETA anunciase el fin del alto el fuego.
Algunas fuentes del sector penitenciario consideran «prematuro» afirmar que el etarra ha retomado el ayuno voluntario como medida de presión para que le dejen en libertad, pero otras hablan de que si la confirmación de la huelga ha de venir a través de una instancia en papel, por ahora va a ser difícil que se produzca. «Ahora mismo, se niega a firmar cualquier papel que se le ponga delante. No quiere saber nada de nadie», explicaron los consultados, que recordaron que en las dos huelgas anteriores, el terrorista sí que comunicó oficialmente su medida de presión.
Tal es el grado de desobediencia del terrorista, internado en una celda individual de la enfermería del centro penitenciario; que, según estas fuentes, se ha negado también a recibir cualquier tipo de asistencia sanitaria. Y eso, pese a que, como dictaminaron los médicos que lo atendieron en el hospital Donostia de San Sebastián y dos facultativos de Instituciones Penitenciarias, no está todavía completamente repuesto de sus anteriores huelgas de hambre.
Tratamiento
De hecho, en el auto del juez central de Vigilancia Penitenciaria, José Luis Castro, que ratificaba su traslado desde el centro médico donostiarra a Aranjuez, se establece un plan específico que incluye tratamiento farmacológico, realizar ejercicios aeróbicos, control de sus dolencias y salidas al centro hospitalario para revisiones en medicina interna, traumatología, psiquiatría y otras atenciones especializadas.
En el caso de que la huelga de hambre se confirme, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ya manifestó el miércoles que es partidaria de que el juez central de Vigilancia Penitenciaria autorice todas las medidas «médico-sanitarias» que sean necesarias, en referencia a la alimentación forzosa, como ya ocurrió en sus protestas anteriores.
Como Instituciones Penitenciarias, el abogado del preso, Álvaro Reizabal, no confirmó que De Juana estuviese otra vez en huelga de hambre, pero la consideró «coherente» con lo que su representado le había anunciado previamente, en el sentido de que se negaría a comer en cuanto regresara a prisión.
El letrado aseguró a Efe que hoy presentará un recurso contra el auto del juez central de Vigilancia Penitenciaria en el que éste avalaba la decisión de Prisiones de trasladar al etarra del hospital Donostia de San Sebastián. Según explicó Reizabal, la resolución, en contra de lo que señala el auto, no se corresponde con lo acordado el pasado 1 de marzo, cuando en otro auto el magistrado dijo que una vez que De Juana recibiera el alta hospitalaria completaría su recuperación en su domicilio bajo vigilancia o con controles telemáticos.
Otro de los que criticó con dureza la vuelta de De Juana a prisión fue el portavoz de Askatasuna, Juan Mari Olano, quien calificó de «jugarreta inmoral, chantajista y vengativa» la decisión del Gobierno. Olano cree que el acercamiento «refleja claramente» cuál es la «voluntad política» del Ejecutivo, y es otro ejemplo de que «en Euskal Herria la Justicia y la democracia es una gran mentira», puesto que «les da igual» lo que recojan los autos judiciales, «un auto se anula con otro».
LA RAZON.
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